¿Por qué no empezar la atribución de las figuras de la corte con El Mago? El Mago podría ser, en términos puros de madurez emocional o lo que entendemos por ella, el equivalente a un/a Niñx (L'enfant). L'enfant, por mucho que quiera, no tiene ningún tipo de madurez y usa algunos atributos y cualidades de El Mago. Y L'enfant no tiene posición en la Corte, algo que, salvo excepciones, es lo común. Es por ello que arranco la equivalencia Papisa=Sota.
Se lo explicaré de una forma más poética. El Emperador sueña que es Caballero de Copas, de Varas, de Oros y de Espadas simultáneamente. Es todos a la vez y, además, El Emperador y sus cualidades que son, por definición, distintas, aunque sea levemente, a las de un Caballero. El Emperador (la actitud o conducta o estado del alma de Emperador) está en los cuatro Caballeros, en cada uno tamizado de acuerdo con el palo al que pertenece: Emperador en Copas, Emperador en Varas, etcétera. Piensen en el Rey Arturo, por ejemplo, que antes fue Caballero y que aún conserva todos los atributos de un Caballero de su Tabla Redonda, pero algunos más por ser Rey que sus caballeros no tienen...
Pero un Caballero de Pentáculos, por ejemplo, ya se cree un poder superior y no sueña con ser Caballero de Copas, o Caballero de Varas o Caballero de Espadas. Es decir que un Caballero de Varas no es la suma de todos los atributos o cualidades del Emperador, sino sólo los que se refieren a su actitud en una situación particular de Pentáculos (lo que tengo), Copas (Lo que amo), Espadas (lo que deseo), Varas (lo que quiero).
De forma más rudimentaria, la juventud emocional (ese desparpajo, esa inocencia, esa confianza casi ciega en uno mismo, casi irracional, en sus posibilidades) la asocio a la Sota (Papisa) con independencia del género. Cierto estado en el que ya se han sufrido algunos desbarajustes emocionales, en el que ya se han sufrido algunas pérdidas, en el que se valora uno más a sí mismo podría asociarse con un Caballero (Emperador). Ese estado en el que ya no hay tiempo y la deshonestidad es una estupidez, la mentira está descartada, se ha alcanzado cierto grado de comunicación, de cierta estabilidad y madurez se podría asociar a una Reina (Emperatriz). Ese estado en el que el conformismo, el aburrimiento, la rutina o sencillamente cierto hastío convierte al Rey en cínico o realista, sarcástico y, en ocasiones, cruel en una especie de subconjunto del Papa.
Yo no uso las figuras de corte para definir una edad o una etapa cronológica de nadie. Si tengo más de 50, soy activo sexualmente, me dan dado un número considerable de golpes y yo he dado otro número considerable, tengo claras algunas cosas y me enamoro como un salvaje de una mujer de mi edad, ¿creen que seré un Rey (cincuentón, blanco, sentado en mi trono heterosexualmente patriarcal) o me pareceré más a una Sota? ¡Mi espíritu es joven aunque mi cuerpo físico ya muestra la erosión de los elementos!
Pero esto, como todo lo que aquí aparece, en esta página, no es más que una pista, una senda abierta en un jardín con innumerables sendas en el que deben dejar que su intuición fluya alegre, porque solo ella les dará la respuesta correcta....y diviértanse!
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