Como leer los Arcanos Menores: MAPA I

Ya saben que utilizo como base de interpretación, el sentido alegórico de cada una de las Sephiroth de un Árbol de la Vida Cabalístico y que uso la atribución Arcanos Menores <-> Sephiroth ideada por Eliphas Levi y Papus y desarrollada por otros célebres ocultistas del siglo XIX y XX. No uso, sin embargo, la referencia a los Cuatro Mundos Cabalísticos, ni los Senderos que unen las Sephiroth y convierto a Daath (la Sephira oculta) en dos arcanos mayores más, uno para los Diez primeros Arcanos Mayores (que llamo Conciencia Sexual) y otro para los Diez siguientes (que llamo Conciencia Andrógina).

La Conciencia Sexual + los Arcanos Mayores que van del I al X pertenecen a lo que Aristóteles llamo Mundo Sublunar o Terrenal; la Conciencia Andrógina + los Arcanos Mayores que van del XI al XX pertenecen al Mundo Supralunar o Espiritual. Cuando escribo "espiritual" no hago referencia a nada que tenga que ver con deidades, espíritus, Yo Superiores, angelitos o angelotes sino a todo eso que no es posible medir ni cuantificar: la bondad, la belleza, el amor, el asco, el miedo, la fe, la moral, los principios y los valores de cada uno de nosotros, el concepto de Normal, etcétera.

Cuando escribo "terrenal" me refiero exclusivamente a todo eso que es valorable y medible cuando estamos en contacto con otros, con los demás, con el mundo: la fama, la gloria, el prestigio, las posesiones materiales, el cuerpo físico, etcétera.

Esto Arcanos Mayores los asocio al Quinto Elemento aristotélico, la Quintaesencia, estados del alma o del espíritu que, a diferencia de Aristóteles, considero mutables o variables. Por lo tanto no puedo asociar un único sentido a cada uno de los Arcanos Mayores sino un mínimo de 10 sentidos o cualidades de cada uno de ellos. Cada una de las combinaciones posibles de Arcanos Mayores (24 en mi caso, 22 en cualquier mazo) colocados en 10 posiciones (más de cuatro mil millones de millones de combinaciones posibles) sería el equivalente a una sola personalidad o carácter. Es pòr esta razón, que me parece impensable el concepto de Reencarnación, puesto que hasta el momento solo un 5% del total de las almas posibles (107.000 millones) han ocupado la tierra desde el principio de los tiempos, según aseguran los arqueólogos y los antropólogos).

Ambos mundos están interrelacionados, evidentemente. No puedo pensar lo que no puedo hacer y no puedo hacer o tener lo que no puedo pensar, un axioma que destroza cualquier idea posible acerca de la existencia de ese eufemismo que llaman "Libre Albedrío". Puedo pensar en ser un santo y regalar todas mis posesiones a un grupo de desfavorecidos, pero algo en mi interior, eso que llamamos Carácter, me lo impide, por lo tanto no soy libre de pensar lo que quiera porque no soy libre de hacer lo que quiera. O dicho de otro modo: es una estupidez decir algo que es imposible que podamos hacer porque, aún cuando lo pensemos, no es posible que lo hagamos...

Los palos de Oros y Varas los asocio al Mundo Sublunar o terrenal: Tener y Hacer; los palos de Copas y Espadas al Mundo Supralunar: Sentir y Pensar. Hay dos acciones claramente activas: Hacer (varas) y Pensar (espadas) y dos pasivas: Sentir (copas) y Tener (oros).

Cada palo, según la atribución aristotélica, está asociada a uno de los Cuatro Elementos y a las Cualidades asociadas a ellos: Oros -> Tierra -> Seco; Copas -> Agua -> Húmedo; Espadas -> Aire -> Frío y Varas -> Fuego -> Calor. Sin embargo solo me interesa la atribución de cada palo con la cualidad y no con el elemento, más que nada porque todos podemos identificar a una persona seca (huraña, austera, severa, distante o cualquiera de las características que consideren dentro del palabro "seco"), pero no se pensar en una Persona Tierra o Aire. Aristóteles entendía que los Elementos son Arquetipos y como tales inaplicables a un individuo en particular.

Las cartas de cada palo van numeradas del 1 al 10 y las coloco tal y como ven en ese Arbol de la Vida.

Los Ases, Doses y Treses se corresponden con la Mente Sin Cuerpo: Qué deseo (Ases), cómo de preparado estoy para alcanzar ese deseo (Doses) y como me planteo mi puesta en escena en el mundo, de acuerdo con lo posible y no con lo probable, para alcanzar ese deseo (Treses).

Los Cuatros, Cincos y Seises hablan de mí mismo exclusivamente, de mis cualidades más destacadas o de las virtudes más características (los cuatros), de mis limitaciones más evidentes (los cincos) y de cómo hacer para convertir mis limitaciones en virtudes y sacar el mayor provecho de mis cualidades (los seises).

Los Sietes, Ochos y Nueves están en el mundo Sublunar puro y duro. De una forma más explícita es qué pasa si, en mi relación con el mundo, soy un exceso de Cuatro, es decir, si avasallo con mis cualidades activas y me convierto en un Siete o qué pasa, en mi relación con los Otrox, si me dejo avasallar, si practico una especie de altruismo enajenado, o un exceso de Cinco para convertirme en un Ocho. Ahí aparece el Nueve, siempre móvil, siempre en un equilibrio complicado entre los Sietes y los Ochos...

Los Dieces no son más que el hastío y el aburrimiento, ese vacío aparente que algunos sentimos cuando tenemos todo, cuando bajo nuestros pies sólo queda esperar a la muerte porque ya no hay nada que nos satisfaga...

Para leer los Arcanos Menores, cuyo sentido o significado es prácticamente inmutable, es importante asociar una palabra clave para cada uno de ellos, teniendo claro que los tres primeros son sólo Mente sin Cuerpo, del cuatro al seis son Cuerpo y Mente y del Siete al Nueve son Cuerpo sin Mente... verán que es muy fácil si se hacen sus propios mapas. Y es importante que se pregunten por qué aparece este arcano menor y no otro, qué hace o no hace LeConsultant para que aparezca cualquiera de los invariables arcanos menores.

Esto me sirve a mi y me funciona muy bien, pero... hagan su sistema personal, modifiquen, sumen, borren, destrocen o hagan lo que quieran, pero piensen, piensen, sueñen y piensen... y diviértanse!