LA TORRE en BINAH (Tríada de las Raíces)

La Torre del RENAISSANCE TAROT

¿Cómo se manifiesta esa Voluntad y esa Sabiduría, cómo actúa o se comporta alguien que, en su tirada del Arbol de la Vida, tiene La Torre en Binah? ¿Cómo es el mundo en el que se mueve el Arcano XVI?

Binah es el Entendimiento, la expresión, la forma de verbalizar o expresar esa sabiduría que se encierra en Chokmah y que fija los límites de la Voluntad en Kether. La Torre en Binah es la Coherencia Interior: no hay desajuste entre su conducta y su pensamiento, lo que le dota de cierto aire de grandeza. La Torre encuentra la felicidad por eliminación de todo aquello que es innecesario o superfluo, pero sobre todo, por la capacidad de erradicar de su entorno todo aquello (y a todos aquellos) que resulte tóxico o perjudicial para la salud mental, emocional y física de La Torre.

El Desapego, pero sólo de aquello que considera perjudicial para sí mismo y para los demás, lo practica con frecuencia transmitiendo una sensación de cierta frialdad o de excesivo desapego. Sin embargo, si se apegan a las situaciones o cosas que les proporcionan bienestar.

Esa Coherencia Interna, ese ajuste perfecto de Normas a una forma de Conducta, les hace ser extremadamente respetuosos con la libertad ajena. Independiente, La Torre tiene tendencia a cierta soledad o aislamiento. No son compasivos con las falsas víctimas, no toleran el abuso de ninguna forma, detestan las palabras malsonantes y los insultos (cualquier insulto lanzado a una persona no es más que un reflejo de algo que somos), aborrecen cualquier tipo de narcisismo y admiten que sus Normas de Funcionamiento sólo son válidas para ellos. Tienen tendencia a no bloquear a nadie en las redes sociales: los Ex (sean de la categoría que sean los Ex) adquieren una cualidad de invisibilidad fascinante.

Tienen buen sentido del humor, leen con cierta frecuencia, están razonablemente bien informados y pasan página con relativa facilidad. La Torre no se cuestiona si lo que hace está bien o mal, sólo si es correcto y le proporciona cierto estado de bienestar. Valora los gestos heroicos que no son por estupidez, los grandes gestos románticos, las pasiones efímeras.

La Torre se asienta en lo efímero, en la corta duración de las cosas: un rayo destructor y todo aquello que era tan bello y paradisíaco se vuelve un campo de cenizas y lágrimas. Y, ante esa brevedad, la Torre elimina lo innecesario. El hedonismo de la Torre es también proverbial.

La Torre, como símbolo del Paraíso, es lo que hay que conservar. Pero si es necesario quemarlo todo para continuar, se hace.... pero imaginen, amigxs, imaginen cómo serían si se sientieran libres para decir, con tono agradable y palabras elegantes, todo lo que les diera la gana a todo el mundo, tanto para bien como para mal, pero siempre haciendo lo correcto para ustedes mismxs... imaginen y diviértanse!