OCHO DE ESPADAS



Ahí tienen a la mujer de rojo con los ojos vendados y con las manos y el cuerpo casi inmovilizado, atravesando un camino de espadas clavadas en la tierra, es la alegoría, dibujada por Pamela Colman-Smith siguiendo el pensamiento esotérico de Arthur Edward Waite, del OCHO DE ESPADAS del mazo de tarot conocido como Tarot Rider o Rider-Waite. Waite define a la mujer como "vendada y engañada" y simboliza, desde su perspectiva, la duración efímera de todas las cosas y la eterna esclavitud. Pero Pamela, añade elementos interesantes.

La espada clavada en la tierra adoptando la forma de Cruz tiene un significado de fecundidad, de fertilidad, de pensamiento interesante.

La venda es símbolo de ceguera cuando la venda está situada en los ojos. Temis, diosa de la justicia, tiene los ojos vendados para mostrar que no favorece a nadie y que ignora a quiénes juzga. Lo mismo ocurre con Eros para dar a entender que el amor flecha ciegamente. La venda cubre también los ojos de la diosa Fortuna, pues la distribución de las riquezas ocurre por azar. En el plano esotérico, los ojos vendados poseen el sentido de retirada interior, de contemplación; los ojos están cerrados, cerrados pues a la codicia y la curiosidad. La venda de tela de las religiones significa la ceguera que deben tener respecto al mundo, y de manera más positiva, la actitud de meditación profunda y de suma concentración espiritual. En este caso es la ceguera a sus propias virtudes y cualidades, a su intuición, a la objetividad (las espadas boca abajo). Las ataduras refuerzan el simbolismo añadiendo el de imposición (ella, por sí misma, no puede atarse las manos a la espalda ni inmovilizarse). Además, al envolver la cuerda la zona de la cadera impide un movimiento natural que no le impide andar, pero que lo hace con muchas más dificultades.

En una interpretación de primer nivel la carta da idea de Ideas Horrorosas Que No Dejo de Escuchar Y Que Me Llevan a Confusión. Ciega a mis propios pensamientos, haciendo oídos sordos a mis sentimientos, haciendo caso omiso a mis verdaderas creencias y fe (esas espadas en forma de cruz), atravieso una situación complicada, prestando oídos a rumores, noticias falsas, pensamientos descabellados, dándoles tiempo y atención suficiente como para andar más despacio (esas ataduras impuestas por un tercero). Esas ataduras pueden estar asociadas a una interferencia real: una mala noticia que, por esperada, no deja de ser mala (Sólo se aplica a las "malas noticias" o eso que el/la consultante considera que lo son).

Es una carta vinculada a la razón, a la ideas y pensamientos de la/el consultante. En este sentido, si sospecho que mi amante es infiel y es un OCHO DE ESPADAS la respuesta es no. Si pienso en emigar a Bostwana pero me anuncian tantos peligros innombrables que empiezo a pensar que Bostwana no es mi sitio y aparece un OCHO DE ESPADAS, entonces emigraré. Si espero la notificación de Hacienda en la que me exigen el pago de unos impuestos atrasados y esa notificación llega, entonces eso es un OCHO DE ESPADAS. Si espero cobrar una liquidación y aparece un OCHO DE ESPADAS, algo o alguien retrasará que yo cobre. Para mí, esta carta es Ruido de Fondo, al principio uno presta atención y después forma parte del decorado, es decir, no es nada más que eso, ruido.


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