La Tirada
Esta tirada aparece por primera vez descrita en el librito de Waite, "la Clave Pictórica del Tarot", publicada en 1909. Waite no se atribuye la "creación" de la tirada (origen celta que cuadra con la filosofía artúrica del tarot dibujado por Pamela Colman-Smith).
Después de haber puesto el Significador (Carta 1), las cartas se extraen en el orden indicado. Es extremadamente importante, asegura Waite, colocar la Carta 6 frente a la mirada del personaje que ejerza de Significador (frente a la mirada del Emperador, por ejemplo o de un Caballero de Espadas). ¿Qué hacer si en el Significador no hay personaje o no mira hacia ningún lado (La Fuerza, La Papisa, algunos reyes)? Waite deja la elección de dónde depositar la Carta 6 en manos del tarotista, aunque en algún otro texto asegura que la carta 6 va a la derecha del Significador. Si se fijan correctamente, las cartas 2 a 6 forman una Cruz Celta.
En Gales, la cruz celta simboliza los caminos que conducen a los cuatro extremos del mundo, y su reunión en un punto central que es el centro del mundo. De acuerdo con ese simbolismo, Waite define qué es cada carta teniendo precaución en la interpretación: si la carta 10 es una Figura de Corte, entonces las cartas se refieren al consultante como si él mismo fuera el mundo. El eje horizontal de la cruz, simboliza Lo Femenino, la materia, el tiempo, la limitación, el eje vertical es símbolo de Lo Masculino, espíritu, espacio y libertad. En este sentido, siguiendo a Schneider y a otros estudiosos de lo Simbólico, Waite define las posiciones que serían el equivalente a "Yo Soy" (.:
Carta 2: Lo limitante, lo que coarta, frena, detiene al consultante en la cuestión planteada. Si la carta es claramente positiva significa que los problemas o impedimentos del Consultante no son tales.
Carta 3: Por encima del Significador: Simboliza o los sueños a los que aspira el/la Consultante respecto a la situación planteada o bien cualidades del Consultante que aún no se han puesto a prueba o permanecen escondidas.
Carta 4: Por debajo del Significador: Muestra el verdadero origen de la cuestión que se ha planteado, algo remoto que se ha hecho presente o bien una actitud del consultante que lo ha traído hasta este punto.
Carta 5: De espaldas al personaje personaje (si la carta tiene personaje) que ejerce de Significador. Si está a la izquierda del Significador simboliza lo que el Consultante ha dejado atrás y que hubiera servido en esta situación y que aún podría usar; si está a la derecha, entonces es algo que el consultante ha dejado pasar, algo que hubiera sido útil en el momento presente pero que es irrecuperable.
La carta 6, frente a la mirada del personaje que ejerce la función de Significador, simboliza lo que se avecina, el futuro inmediato y los factores que pueden alterarlo. Si está a la izquierda, entonces el consultante puede revertir la situación, si está a la derecha, le será más difícil (pero no imposible). Como forma de lectura les sugiero que lean el eje vertical, de arriba a abajo, como lo Activo y el eje horizontal como lo Pasivo. Eso dará una idea bastante aproximada del "Yo Soy" del consultante ante la cuestión planteada.
Después de saber ese "Yo-Soy" en esta situación dada, quedan cuatro cartas que se colocan a la derecha, de abajo a arriba. La 10, ya saben, es la Conclusión.
La Carta 7 es lo que realmente está aflorando del Significador, es decir, cual es la imagen real que está dando de sí misma la situación o el/la Consultante en una situación dada. Muestra la cualidad más destacable, ya sea para bien o para mal.
La Carta 8 es, según Waite, la Casa en el sentido de todo lo que es el entorno del consultante y que puede afectarle en esta situación. La carta muestra cómo afecta esta situación a su entorno o cómo está afectando su entorno a su actitud frente a esta situación. Dicho de otra forma, esta carta muestra cómo estabiliza o desestabiliza la Zona de Confort del consultante la situación o conflicto en el que está inmerso.
La Carta 9 revela los temores o esperanzas del consultante, el desenlace. Waite recomienda un sistema de lectura Global teniendo claras las posiciones de las cartas.
Como todas las tiradas, como casi todo en este Mundo ilusorio que tiende hacia la entropía, es susceptible de modificación, ampliación, reducción, alteración o destrucción. No se sometan a reglas fijas. Usen esto como base para hacer sus propias tiradas. En mi variante de esta tirada, las cartas 3 a 6 las coloco en las esquinas del Significador (que elijo entre Figuras de Corte nada más), de forma que en la parte superior están las cartas 3 y 6 y en la inferior 5 y 4, siendo 3 Copas; 6, Espadas; 5, Oros y 4, Varas.
Asegura Waite que la carta 10 de la Cruz Celta es la que proporciona la respuesta a una pregunta determinada. Pero, ¿qué pasa si la carta 10 no responde sino que abre interrogantes o deja una solución abierta?
¿Cómo sacar la Carta 1, El Significador?
Waite describe el modo por el cuál debe ser elegida la carta número 1 que él llama "Significador": Es el tarotista el que, en función de la pregunta y del consultante , elegirá que carta le representa mejor. si es un hombre maduro, por encima de los cuarenta, elegirá un Rey; si es menor, un Caballero. Si es mujer, elegirá a una Reina si es mayor y a un Paje si es menor. Pero no sólo así. Waite sigue:
<< si es de complexión fibrosa, de pelo claro o rubio y ojos azules entonces es de bastos. Si tiene pelo castaño y ojos grises o azul oscuro, entonces es de Copas. Si son robustos, con pelo oscuro, mirada fría, entonces son de Espadas. Si son de piel más oscura, con ojos marrones o negros, con el pelo oscuro, entonces son de Pentáculos >>.
Waite asegura que, obviamente, intervienen factores subjetivos y que en el caso de conocer al consultante, puede aportar su punto de vista. El otro criterio que escribe Waite para elegir el Significador va en función de la pregunta. En este caso se deberá escoger la carta entre dos posibilidades: un Arcano Mayor o una carta de Corte. Por ejemplo, si la pregunta es ¿Necesitaré un abogado?, la carta elegida deberá ser La Justicia (arcano XI en el tarot de Waite). Si la pregunta en cambio es ¿cómo saldrá mi juicio?, una carta de Corte será la escogida como Significador. En todos los casos el Significador lo escoge el tarotista, jamás el/la consultante. Después, se baraja el mazo completo y se hacen tres montones. Y se sigue la tirada (que otro día seguiré contando cómo se hace). Es interesante saber que si la Décima Carta es otra figura de corte, entonces poco importa: todo lo que concierne a ese asunto está estrictamente en sus manos y no hay ningún factor externo a él que sea ni cooperador ni desestabilizador. Les seré franco: la Carta Uno la extrae el Consultante de las cartas de Corte nada más; no me veo capaz de discernir que palo de la baraja es alguien en función de rasgos étnicos.
La Carta 10, El Resultado
Waite dice que, en ese caso, debe usarse la carta 10 como Significante (es decir, ocupar la posición 1 de la tirada), barajar el resto, hacer tres montones y partir del nuevo Significador. Si la carta 10 es una figura de Corte entonces todo lo que se lea desde la carta 2 hasta la 9 ambas inclusive se refieren únicamente a aspectos relacionados con el/la consultante: sus miedos, sus anhelos, sus impedimentos, sus obstáculos y no harán referencia a nada exterior a él
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