LA MUERTE en BINAH (Tríada de las Raíces)

La Muerte del LASENIKUV TAROT

¿Cómo es el mundo del consultante cuando este arcano aparece en la posición 3 dee la tirada tarológica de la Tríada de las Raíces? ¿Cómo se comporta bajo el influjo de este arcano? ¿Qué dice y cómo lo dice?

El/la consultante está de luto riguroso. Ninguna de sus expectativas se ha cumplido, no ha obtenido frutos después de enormes esfuerzos y sacrificios. Se ha perdido uno de los pilares emocionales del consultante y ahora se siente desvalidx. El duelo ha comenzado, ya somos plenamente conscientes de lo que hemos perdido, de cómo lo hemos perdido y qué parte de responsabilidad tenemos en esa pérdida. Aún nos mantenemos apegados a un pasado que nunca volverá.

Kubler-Ross asegura que hay que fijar un plazo para estar de duelo, un período de tiempo en el que el consultante pasa por esas 5 Fases Del Duelo que ella tan bien ilustró. En general, el duelo por el fallecimiento de un hijo ronda los 14 meses, el de una ruptura sentimental, unas 14 semanas, que pueden variar pero no desviarse a cifras descabelladas que sólo indican una patologización del dolor.

Pero más allá de la muerte de un familiar, hay cientos de miles de situaciones que pueden provocar la aparición de este arcano en Binah: esas oposiciones que no aprobé después de estar cinco años encerradx estudiando y que, por un pequeño fallo de coordinación intestinal, suspendí; el diagnóstico de ese tumor inoperable en el cerebro que crece a razón de media micra al año pero que en un plazo corto me matará; esa analítica terrible que asegura que no puedo ser madre cuando siempre he soñado con tener vástagos; esa persona a la que yo amaba enloquecidamente y quizá obsesivamente o paranoicamente y que ya se que no va a volver jamás conmigo; el fin de mi trabajo porque la empresa para la que trabajé los últimos diez años de mi vida cerró sus puertas y desde entonces espero que, tal y como me prometieron, reabran y me contraten otra vez, o....

De esta forma, la Muerte sensibiliza de tal forma al individuo que tiene dos formas de acción que se convierten en duda: ¿dejarse arrastrar por el Ego y caer en las tentaciones del Diablo y con él atravesar los pozos del Infierno o aprender de la experiencia, aprender de nosotros mismos, desarrollar cierto grado de humildad y respeto, digerir la pérdida y alcanzar la iluminación de La Estrella?

No se trata de "pasar página", ese enorme cliché (¿de qué sirve pasar página si estás en el mismo libro? ¡Cambia el libro!). No se trata de "olvidar y perdonar", se trata de "Digerir", es decir, convivir con ello.

Es quizá por este sentido de Tránsito del Duelo, que las interpretaciones de esta carta siempre la mezclan con la palabra "Renacimiento", siempre suponiendo que ese renacimiento es a mejor (¿cabe imaginarse un cambio "a peor" en un Sistema de Positivismo Feroz? ¿Qué es "mejor" y "peor"?). Y no, no es renacer, es reconstruir. Pero recuerden, esto es solo un punto de vista más: úsenlo, deséchenlo, modifíquenlo, añádanlo a lo que ya saben de este Arcano y verán como sus lecturas ganan en profundidad. Y diviértanse!