EL PAPA en CHESED


¿Qué implica, para LeConsultant, que este Arcano V aparezca en la posición 4 de la tirada del Árbol de la Vida? ¿Bajo qué circunstancias puede aparecer este arcano en esta posición en esta tirada? ¿Qué aporta la alegoría de Chesed al sentido general de El Papa?

Chesed es la alegoría de la Belleza y la Bondad, no en un sentido físico (lo que no descarta que físicamente El Papa sea más que interesante), sino en un sentido de pureza, de inocencia, de esa ingenuidad que es creer que existe la Perfección. El Papa, en Chesed, aspira a esa perfección moral, ética y estética. Aspira a Lo Imposible. Y en el camino hacia ese imposible, hace de la Virtud (sea lo que sea esa virtud en la cabeza del Papa) la única forma posible de existencia. Para él y para los de su tribu, clan, familia, grupo de amiguetes o compañeros de trabajo. El Papa en Chesed es la alegoría del Imperativo Categórico: hay una norma racional y no de origen divino que determina con exactitud qué acción (o inacción) es necesaria. En este caso particular, es el Papa el que fija esa norma racional, la que fija que debe o tiene que hacerse/o no hacerse. El uso del DEBER y del TENER QUE, obligaciones para los demás en virtud de un imperativo categórico, están en este Papa en Chesed.

LeConsultant se encuentra en una situación que requiere más tolerancia, más mano izquierda, más relajación de costumbres, más amplitud de miras. Porque lo que hace LeConsultant en este momento (ese Papa en Chesed) para mantenerse en una zona de confort que está representada por Cuatros, es excesivo: demasiadas reglas, demasiadas prohibiciones, demasiados condicionamientos, demasiado sentido del ridículo, ausencia de sentido del humor, chantaje emocional y un amplio catálogo ilustrado de formalidades, ritos, gestos, frases y actitudes. El Papa actúa y hace actuar a los demás porque deben hacerlo.

Así, el miedo a perder una determinada posición, un determinado trabajo, un amor o lo que sea que tiene tanto miedo a perder (y que está en esos Cuatros), le está conduciendo por un camino de búsqueda infatigable de la perfección de acuerdo con su ley moral (la que está determinada por el Papa) que terminará abocándole al fracaso. Esa búsqueda de perfección implica frenar los instintos, practicar la castidad o el celibato, cumplir escrupulosamente con la ley aunque sea inmoral, por ejemplo. La banalidad del mal se esconde aquí, del que no es consciente de hacer algo inmoral aunque sea legal.

Pero quizá donde yo veo a un maestro de la manipulación, de la mezquindad y de la falsa apariencia de ser un modelo o un guía, ustedes vean otra cosa más enternecedora, menos brutal. Piensen. Quizá alguno de estos excesos (4-7, 5-8) les vengan bien si leen cartas invertidas... Pero sobre todo, diviértanse!


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