(Presupongo que tienen nociones básicas de tarot o elementales. Al no saber del sexo de LeConsultante debo entender que todas las figuras de la corte hacen referencia a cualquier persona con independencia de su edad, su sexo, su orientación sexual o su etnia (¿se imaginan en Mozambique asegurándole a alguien que se acerca "una mujer de ojos claros y pelo rubio con el que vivirá una hermosa historia de amor"?). TheCourtesans no son más que 16 formas posibles de estar en el mundo, siete más que el Eneagrama y sus variantes. Y, diferencia del Eneagrama, que, de alguna forma, fija a cada individuo en un eneatipo, cada uno de nosotros puede ser cualquiera de TheCourtesans en cada una de las posibles circunstancias de la vida, es decir, es un sistema dinámico, flexible, abierto. Cada uno de nosotros es la suma de 16 personajes de la corte).
A los personajes de Copas les impulsa el Amor entendido como una corriente, un flujo. Es una forma de estar, de ser, buscando la armonía, el equilibrio, la tranquilidad, la calma. Y para ello usan la mejor herramienta que existe: la simpatía, la cordialidad, la sonrisa, la palabra amable, la actitud dulce, la calidez en el trato. Incluye a personas, animales, plantas y objetos inanimados. Practican el difícil arte de la compasión, de no interferir en las decisiones de otros, no ayudar al que no lo pide, no hacer favores que nadie ha solicitado. No tiene nada que ver con poderío material o económico (un personaje de copas puede ser inmensamente rico o perturbadoramente pobre pero ser una persona accesible y cariñosa). No tiene nada que ver que sea religioso o no, porque su vida espiritual es alcanzar el punto en el que lo que piensa coincide con lo que dice que a su vez es lo que hace y en el que está dispuesto a sacrificar lo que sea necesario sacrificar para conservar este estado de coherencia interior y de armonía con el entorno, sus semejantes, sus disímiles y sus variantes. Los personajes de Copas no están interesados en lo que piensa la gente de ellos, solo están pendientes de su propia felicidad, usando como arma, la bondad, la amabilidad y la dulzura. Dentro de esta descripción caben tantos matices como quieran, de hecho son el ideal absoluto de las Copas. Que esté más cerca o más lejos es que sean Sotas o Reyes. Los personajes de Copas eliminan lo superfluo, lo normativo, lo condicionado por modelos educativos anticuados, por un intento de vivir en paz emocional, en el que la búsqueda de cierta alegría sea el equivalente a alcanzar cierto grado de felicidad. Por ello casan mal con Oros (el Orden) y con Espadas (la Ley).
Ya saben que establezco una correlación entre Tríadas de un Arbol de la Vida cabalístico y las Figuras de la corte (https://casadeltarotblog.blogspot.com/…/las-triadas-del-arb…) . Verán que el Rey de Copas se mueve en la parte alta del Arbol: es decir, es más cercano al desapego material y más interesado en alcanzar cierto estado de paz. La Reina comparte estos atributos, pero está más cercana a la realidad, a la lucha entre el Ego y el Altruismo loco (no en vano es Emperatriz). El Caballero, está en la parte inferior derecha, aún alejado de las cotas de amor universal en las que se mueve el Rey. Y la Sota, con menos seguridad en sí misma, pero con ideales de Bondad. La parte más baja del Árbol, hasta la linea roja que está en Tipheret, en el centro, es el Mundo, lo mundano, las relaciones con los otros en las que aún influyen valores tradicionales: normas, reglamentos y educación. En la parte alta del Árbol, los valores tradicionales o comúnmente aceptados por un grupo o sociedad, no valen nada.
Pero piensen por su cuenta. Háganse una tirada para saber cómo son. Usen solo Figuras de la Corte. Tiren solo una carta. Pregúntense ¿cómo soy en el amor? ¿cómo en el trabajo? ¿cómo en los negocios? ¿cómo me ven los demás?... y diviértanse!
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